“Ahí viene el lobo” dice la más famosa frase del cuento infantil “El pastor mentiroso”, ella recoge la broma que gastaba el burlista jornalero todas las veces que se divirtió a expensas de las buenas personas que le creyeron y querían ayudarle. La amenaza de invasión militar a suelo venezolano, es una historia de la que muchos han hecho burla por lo tantas veces repetida por políticos de ese país. La diferencia es que esta vez todo indica que el “lobo” es el que anuncia su llegada.
VT Actual hace un repaso por los indicios más evidentes de que Venezuela está a las puertas de una intervención militar extranjera.
7. Desmantelamiento de organismos de integración regional
Cuando Hugo Chávez gobernó Venezuela entre 1999 y 2013, la región vivió momentos estelares de acercamiento político, económico y cultural. La creación de organismos como la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), el fortalecimiento de MERCOSUR con el ingreso de Venezuela y los proyectos de crear una moneda y hasta un banco regional, tuvieron días mejores que los que viven hoy.
La UNASUR, acusada de ser un “aparato” para sostener al gobierno de Venezuela, se vino abajo con el retiro de varios países incluyendo el país sede (Ecuador). La CELAC no tiene voz ni voto en las decisiones regionales. La ALBA ya no suena con la misma fuerza y Venezuela fue suspendida del MERCOSUR. Los vecinos de la nación caribeña han tendido una tenaza que cada día asfixia con mayor fuerza al pueblo venezolano.
6. Precios del Petróleo
Los precios del crudo tienen algún tiempo en alza y a la administración de #DonaldTrump eso no le gusta. En reiteradas oportunidades el inquilino de la Casa Blanca ha expresado sus pretensiones de controlar el precio del petróleo, al girar “órdenes” a los países miembros de la OPEP para que incrementen su producción, y así provocar la baja del hidrocarburo.
Venezuela es el país con la reserva de petróleo más grande del mundo y es también el principal sostén económico de ese país. El cerco económico internacional y los malos manejos en la industria petrolera nacional, han provocado una merma sustancial en la producción del “oro negro” en el país caribeño. En coherencia con el cerco financiero y la inundación de petróleo en los mercados internacionales, Estados Unidos maneja políticas de precios bajos para asfixiar también la economía de Venezuela, gobierno que está decidido a derrocar.
5. Vecinos peligrosos
Colombia comparte con Venezuela la frontera más larga y viva de América del Sur. Sus problemas limítrofes tienen casi la misma edad de esos países y la guerra neogranadina ha sido un dolor de cabeza para los venezolanos por décadas. Recientemente Colombia se apuntó en la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y desde allí comparte políticas, adversarios e intereses con los otros países belicistas que integran este bloque. El armamento colombiano es constantemente renovado por EEUU e Israel. La presencia de 7 bases militares estadounidenses en su territorio y la hostilidad que mantienen contra Venezuela, les convierte en la cabeza de playa predilecta para una intervención militar contra ese país.
Por otra parte, Brasil, antiguo socio del gobierno de Chávez, sufrió la ruptura constitucional de su ordenamiento legal e impuso un presidente de derecha que rompió todo tipo de relaciones con Venezuela. Ahora encabeza junto a Colombia, Argentina, Perú y Paraguay, la lista de países que se han declarado contrarios al gobierno de Caracas.
4. Los escenarios de #DonaldTrump
El presidente norteamericano sufre de verborrea. Sus declaraciones siempre están salpicadas de polémicas y suelen ir cargadas de políticas coherentes con su discurso. Fue un hecho comunicacional la amenaza directa que lanzó contra Venezuela al decir que no descarta ningún escenario contra el país petrolero.
En sus declaraciones, reiteradas en distintos escenarios, el presidente norteamericano ha impulsado la idea de que posiblemente una acción como ésta sea llevada a cabo por los mismos Estados Unidos o por uno de sus socios en la región.
Pese a la disposición del presidente venezolano Nicolás Maduro, de buscar la vía del diálogo con Washington, la respuesta siempre ha sido evasiva por representantes de la Casa Blanca.
3. La receta repetida
Funcionó en Libia, antes en Irak y tiene a Siria en una guerra interminable. La fórmula para sacar gobiernos incómodos a los intereses de EEUU, tiene un manual de procedimientos. El primer paso es manifestar preocupación por cualquier política emprendida por el país en cuestión, seguida de un bombardeo publicitario inagotable contra su gobierno. Una vez avanzada esta “guerra psicológica”, el siguiente punto es financiar movimientos disidentes que puedan justificar los titulares de prensa que ya tienen preparados para acusarlo de “violador a los derechos humanos”.
El tercer aspecto a desarrollar es el desconocimiento del sistema de gobierno del país objeto, con la intención de aislarlo de la Comunidad Internacional y propiciar una serie de sanciones contra sus funcionarios, instituciones o intereses económicos. Finalmente llega la amenaza directa para luego dar paso a la intervención militar. Justo en ese punto, donde antes estuvieron Irak, Libia o Siria, está ahora Venezuela.
2. La reunión de Bali
En el marco de la cumbre del Fondo Monetario Internacional (FMI) que se desarrolla en Bali, Indonesia, los ministros de Finanzas de Alemania, Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Francia, Guyana, Italia, Japón, México, Panamá, Paraguay y Reino Unido, se reunieron bajo la dirección del Secretario del Tesoro de EEUU para “aumentar la agresión diplomática y financiera” contra Venezuela, según denunció la Cancillería de ese país.
El encuentro llama la atención porque no formaba parte de la agenda del FMI para esta cita y se produjo bajo una sospechosa recepción que reunió a varios de los principales enemigos declarados del gobierno de Caracas.
1. El curioso proceder de la oposición venezolana
Venezuela hace elecciones prácticamente cada año desde que el socialista Hugo Chávez llegó al poder. La oposición ha perdido la mayoría de ellas incluyendo las realizadas en la era Maduro. Pero llama poderosamente la atención el desinterés de estos factores por participar en los recientes procesos electorales, incluyendo el que se celebrará en diciembre próximo para elegir nuevos concejales. Para muchos, la actitud despierta sospecha.
El reconocido y veterano periodista venezolano José Vicente Rangel, denunció en su más reciente programa dominical que ya no se avizora en el panorama un Golpe de Estado de la Fuerza Armada o un atentado terrorista como el del pasado 4 de agosto, pues a su juicio “la opción que está planteada es la intervención armada”.
Rangel fue directo y enfático al señalar que “la intervención armada está preparada y lista… han sido creados centros de información y de procesamiento de datos… en todo cuanto se refiere a la situación real de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana: efectivos; situación de los mandos; estado en que se encuentran las distintas unidades; la logística; la inteligencia; además, una estimación aproximada de la capacidad de respuesta de la Fuerza Armada”.
Millones de venezolanos se mantienen a la espera de que todas estas señales se equivoquen esta vez.
RB