A través de la red social Twitter, el senador estadounidense por el partido republicano, Marco Rubio emitió un mensaje en el que daba cuenta de supuestas acciones represivas ejecutadas por presuntos agentes cubanos en la población de Ureña, en el fronterizo estado venezolano de Táchira.
Una vez transmitido el mensaje, continuó con una serie de tuits en las que reforzaba la matriz que deseaba imponer sobre violencia y disturbios en la zona contra manifestantes de oposición, especialmente contra quienes promueven el ingreso de ayuda humanitaria a Venezuela desde territorio colombiano.
De hecho, informó de “agentes cubanos vestidos como oficiales de la Guardia Nacional Bolivariana” que impulsaban a las fuerzas a atacar civiles.
En un tercer mensaje instaba a orar porque se estaban viviendo “momentos muy tensos” mientras los civiles salían a las calles “en el lado venezolano de la frontera” para apoyar el ingreso de la “ayuda pacífica” que EE.UU. intenta ingresar al país, desde Colombia.
Agregaba, además, que “la Guardia Nacional, unidades especiales de policía, pandillas armadas pro-régimen y agentes cubanos” atacaban a las personas. No obstante, el Gobierno venezolano reafirmó temprano una medida de cierre temporal de la frontera con Colombia y alertó que sectores subordinados a las órdenes del imperio norteamericano insisten desde la nación colombiana en desestabilizar la región.
FF