Aunque en un primer momento los ataques al Sistema Eléctrico Nacional (SEN) se generaron con la finalidad de desestabilizar el país, para el autoproclamado el sabotaje sirvió para solapar los actos de corrupción perpetrados por su parte y algunos de los miembros de su equipo de trabajo.
En este sentido, vale destacar que recientemente, el autoproclamado fue inhabilitado por 15 años para ejercer cargos públicos, por presuntamente estar inmerso en actos de corrupción al ocultar y falsear datos contenidos en su Declaración Jurada de Patrimonio, al mismo tiempo, en que ha recibido dinero de instancias nacionales e internacionales sin ningún tipo de justificación.
Por otra parte, en los últimos días, mientras el pueblo venezolano permanecía a oscuras producto del sabotaje eléctrico, se dio a conocer sobre la privativa de libertad contra el director del despacho del autoproclamado Juan Guaidó y secretario de la Asamblea Nacional en desacato, Roberto Marrero, por estar presuntamente involucrado en actos de conspiración, legitimación de capitales y ocultamiento de armas de guerra.
Esta trama de corrupción también salpicó a quien fuese el consultor jurídico de la petrolera rusa Rosneft y pariente de Guaidó, Juan Planchart, a quien le fueron imputados los cargos de conspiración, legitimación de capitales y ocultamiento de armas de guerra.
No obstante, por medio de las redes sociales se desató la polémica, cuando la periodista opositora y prófuga de la justicia venezolana, Patricia Poleo, arremetiera contra Guaidó por promover un campaña en su contra luego de que ésta amenazara con difundir información que compromete la gestión de Marrero durante su paso por la alcaldía de Baruta.
A su vez, Poleo confirmó la sospecha de quienes han denunciado el financiamiento desproporcionado del Gobierno estadounidense a las acciones desestabilizadoras que pretende impulsar el autoproclamado, a través de la redes sociales y medios de comunicación, al indicar que en los próximos días hará revelaciones sobre los pagos a artistas e influencers.
En este contexto, vemos como no solo ha imperado la conciencia del pueblo venezolano ante los ataques eléctricos, sino que la justicia venezolana también ha tomado un papel importante sobre los actos vandálicos que se pretenden ejecutar en el país.
YR