Un hecho histórico irrumpió este domingo en el panorama mundial, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC-EP), después de más de medio siglo de beligerancia, celebraron un congreso nacional para avanzar hacia la constitución de un partido político, que tiene el reto de participar en los procesos electorales y reingresar a la vida política del país.
Este momento ocurre luego de los diálogos de paz entre el gobierno colombiano y las FARC-EP, ex grupo insurgente que levantó las banderas de Jorge Eliécer Gaitán en la lucha por la reivindicación del pueblo y contra la oligarquía colombiana.
«Seremos alternativa y un nuevo poder territorial. Consolidaremos nuestra fuerza política convirtiéndonos en un nuevo poder político que transforme al Estado», dijo Iván Márquez para inaugurar el encuentro en el que aseguró, que este Congreso es apenas el primer paso para la reincorporación en la vida política de las FARC-EP.
El Congreso se inició en Bogotá con el eslogán «por un gobierno de transición para la reconciliación y la paz”, con la participación de unos 1.100 delegados asistentes.
Por su parte, el comandante de las FARC-EP, Rodrigo Londoño (Timochenko) recalcó que no traicionarán la promesa de Marquetalia: «siempre será nuestro propósito la justicia y la paz de nuestra patria”.
El regreso de esta fuerza a la vida política del país llena de expectativas al mundo, esperan que no se repitan masacres que se dieron en el país con la promesa de la paz, que se respeten los derechos políticos para dar una discusión de altura. Pero mientras, continúa creciendo el paramilitarismo, el asesinato de líderes sociales, la impunidad y el tráfico de drogas. La paz es el único camino, ¿es este el principio de la paz?
JS