El 2018, además de grandes acontecimientos políticos, tuvo pérdidas particulares, gigantes del arte culinario pasaron a otro plano y se eternizaron en la historia de la cocina profesional, uno de ellos fue Paul Bocuse, su restaurante Michelin alcanzó tener tres estrellas, el máximo número en la calificación que puede tener un restaurante, la excelencia fue sólo uno de los atributos de su carrera en el arte de la cocina.
Bocuse, es reconocido como el chef francés más famoso que dejó la era de la posguerra, además de ser destacado en el movimiento culinario revolucionario que fue conocido como «la nouvelle cuisine» o la nueva cocina, traducido al español, esta figura representativa de la cocina lamentablemente falleció el pasado 20 de enero a los 91 años.
Entre tanto la partida del chef, también francés, Joël Robuchon el pasado 6 de agosto, más conocido como el «rey Michelin» fue otro duro golpe a la historia del arte culinario moderno, pero su legado a la cocina mundial le valió el título de «cocinero del siglo», y «Mejor obrero de Francia», otorgado por el gobierno galo y alcanzó a merecer más de 30 estrellas Michelin.
La característica personalidad de Robuchón le llevaron a ser el primer jefe de cocina que vistió de negro a su equipo de chefs y hacer que los cocineros se acercaran más al público, lo que hacía posible «una cocina más accesible» que buscaba llevar buenas técnicas a propuestas menos encumbradas, sino que promovió la transparencia en la cocina.
El chef y presentador conocido como uno de los «chicos malos» de la cocina, Anthony Bourdain por la forma inusual de hacer su trabajo, también murió de forma inusual al suicidarse en un hotel de Estrasburgo, en Francia. Era conocido por su forma de explorar los rincones culinarios más insólitos del planeta, la trayectoria y su estilo irreverente le hicieron ser uno de los tres profesionales de la cocina que trascendieron a la historia en 2018.
EC
