La justicia norteamericana se retracta parcialmente y abre las puertas para que el gobierno del presidente Donald Trump no acepte nuevas solicitudes en el marco la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA).
Por lo que nuevos inmigrantes o “soñadores” como también se les conoce, que intentaban calificar para el amparo migratorio que otorga no lo podrán hacer de cara a la decisión del juez federal John D. Bates.
Bates, también detuvo la conocida “libertad condicional anticipada” en la que permitía que los beneficiarios del DACA viajaran fuera de Estados Unidos y luego regresar a territorio norteamericano de forma legal, que en ciertos casos podía ayudar a normalizar el estatus migratorio de los solicitantes.
La decisión del juez, aseguran fue porque de aceptar nuevas solicitudes de DACA, así como, permisos de “libertad condicional anticipada” se hubieran recibido un total de 130,000 peticiones, lo que habría sido imposible de lograr porque hasta ahora un considerable retraso en la entrega de los permisos.
En este sentido, las agrupaciones de defensa de los inmigrantes, consideran esta decisión es en parte una derrota como parte de las luchas que han llevado a cabo desde la llegada de Trump al poder, por lo que indican es posible que sea apelado ante la corte de circuito en Washington.
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