Ali Vahdani Pour, un ciudadano de 28 años de Irán, fue sentenciado por un juez de distrito de los Estados Unidos (EE. UU) a 137 días de prisión, tras declararse culpable de mentir bajo juramento al Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS).
Específicamente, Pour admitió que negó falsamente haber servido en el ejército iraní y recibir el estatuto de refugiado en Italia, antes de buscar asilo en EE. UU.
“No se tolerarán las declaraciones falsas para respaldar su reclamo de asilo en los EEUU”, dijo David Radel, director de asilo de USCIS en Los Ángeles.
La investigación en este caso fue realizada por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y el Buró Federal de Investigaciones (FBI).
No quedó claro si el hombre será deportado de inmediato tras cumplir su sentencia.
Las autoridades migratorias están aumentando sus indagatorias a la hora de procesar solicitudes de beneficios migratorios, ya sea para refugiados, asilados o peticionarios de Residencia Legal Permanente o “green card”.
De hecho, USCIS decidió abrir una oficina que identificará a las personas de las que sospeche hayan hecho trampa para conseguir su naturalización y las cancelará si así fue.
El director de la agencia, L. Francis Cissna, dijo que contrató a decenas de abogados y agentes de inmigración para revisar los casos de inmigrantes que tenían orden de deportación y presuntamente utilizaron identidades falsas para conseguir después tarjetas de residencia (green card) y la ciudadanía.
Los casos serán remitidos al Departamento de Justicia, cuyos fiscales podrían después intentar que se revoque la ciudadanía a esos inmigrantes en procesos civiles. En algunos casos, los fiscales podrían presentar cargos penales relacionados con fraude.

ER