El exfutbolista argentino Diego Maradona fue internado el viernes en un hospital de las afueras de Buenos Aires debido a un sangrado estomacal que se le descubrió mientras era sometido a estudios médicos. Este sábado él mismo anunció que ya estaba fuera de peligro.
«Fui a la clínica a hacerme resonancias (…) No pasó nada», dijo el ídolo argentino en una radio local, descartando problemas de gravedad.»Ahora voy por la revancha con Dorados. Me están esperando», añadió.
Maradona, de 58 años, se realizaba exámenes de rutina antes de viajar a México para volver a dirigir a los Dorados de Sinaloa cuando le detectaron el sangrado, por lo que le hicieron estudios adicionales y quedó en observación por varias horas. Por la tarde, recibió el alta médica y se retiró a su casa, e en los próximos días deberán realizarle nuevos estudios.
Más temprano el viernes, el abogado de Maradona, Matías Morla, había confirmado que el campeón del mundo en México 86 continuará como entrenador de Dorados y que se incorporará a los entrenamientos luego de realizarse «exámenes médicos de rutina en Argentina» solicitados por la Federación Mexicana de Fútbol.
A su vez, Dorados informó que el equipo será dirigido en los primeros partidos por el auxiliar técnico José María Martínez. «El club ha solicitado, por causas médicas, que el entrenador se presente en próximas fechas», dijo el club en un comunicado.
NB