A pesar de que se había negado en varias oportunidades, el primer ministro de Malta, Joseph Muscat, autorizó al barco Aquarius, con 141 refugiados a bordo, a atracar en sus puertos para después repartir estas personas entre cinco países europeos.
«Malta servirá de base logística» para la recepción de los refugiados dijo el Gobierno maltés en un comunicado, en el que añadió que los pasajeros serán distribuidos entre Francia, Alemania, Luxemburgo, Portugal y España».
Recordemos que tanto Italia como Malta se habían negado a recibir el navío, situación que fue denunciada por las agrupaciones humanitarias que fletaron el barco para operaciones de rescate.
El Aquarius, que reanudó las operaciones de auxilio en las costas libias la semana pasada, rescató a 141 refugiados el pasado viernes, de los cuales más de la mitad son menores y un tercio mujeres provenientes mayoritariamente de Somalia y Eritrea en África.
Cataluña se puso a la orden
También el presidente de Cataluña, Quim Torra, ofreció tres puertos de su región –al noreste de España- para acoger al Aquarius, a pesar de que Madrid se muestra reticente a recibir nuevamente el buque humanitario.
Pero el gobierno español se muestra ahora reticente a permitir de nuevo el desembarco de los migrantes del Aquarius tras las duras críticas recibidas desde la derecha, sobre todo teniendo en cuanta que están en vísperas de varias contiendas electorales.
He demanat a @portsgencat que acollim el vaixell #Aquarius a Palamós, Vilanova o St Carles de la Ràpita, ports sota l’autoritat del Govern de Catalunya, per poder desembarcar les persones rescatades amb totes les garanties. Catalunya sempre serà terra d’acollida pic.twitter.com/m7ykU0X5c2
— Quim Torra i Pla (@QuimTorraiPla) August 14, 2018
Desde principios del año, más de 25 mil inmigrantes llegaron a bordo de embarcaciones precarias, según el último balance del organismo de la ONU encargado de las migraciones, lo que triplica la cifra de 2017 en el mismo periodo.
ER