Es judío, multimillonario y sueña con un mundo en donde no existan las fronteras ni la soberanía nacional, se erija un gobierno único y se siga conservando el dominio de las minorías. Hablamos de George Soros, dueño del Grupo Quantum, una batería de capitales especulativos que opera desde las Antillas holandesas, considerado una de las ‘maquinarias inversoras’ más influyentes del mundo.
Este personaje es responsable de promover las revoluciones de colores de Yugoslavia y los que en el pasado fueran países socialistas, así como la Primavera Árabe, el Maidán en Ucrania, la invasión de Europa por los migrantes del Oriente Medio y más recientemente el éxodo de ciudadanos hondureños hacia EEUU, en vísperas de las elecciones legislativas de ese país, que ha puesto contra la pared a #DonaldTrump.
De acuerdo con el diario La Tribuna, las víctimas de EEUU que viajan desde Honduras han sido financiadas por la organización Pueblo sin Fronteras, que es apoyada a su vez por tres grupos subvencionados por la Fundación Sociedad Abierta (OSF), propiedad de George Soros.
El multimillonario, que al parecer pretende utilizar a los hondureños para impulsar una especie de revolución de colores en EEUU y así poner en juego la gestión del inquilino de la Casa Blanca, se comprometió en 2016 a invertir hasta 500 millones de dólares en programas y compañías que benefician a migrantes.
En muchas ocasiones Soros ha declarado su rechazo a las políticas de #DonaldTrump, a quien considera una amenaza para el mundo. Lo irónico es que el magnate tiene una gran cuota de responsabilidad en la miseria de muchos pueblos, sobre todo aquellos a los que arruinó para luego comprar sus recursos a precios irrisorios.
ARG