Luego del escándalo que se generó tras el anuncio realizado por el investigador chino He Jiankui, quien hizo del conocimiento público la creación de dos niñas gemelas modificadas genéticamente con CRISPR, un grupo de científicos recomiendan frenar los usos clínicos de la edición genética en la línea germinal humana.
En esa oportunidad, el genetista explicó que había eliminado el gen CCR5 de forma permanente de las niñas que fueron concebidas de manera artificial, con el objetivo de hacerlas resistentes al VIH, sin embargo esta acción fue catalogada como una falta a la ética, ya que esta técnica podría dar cabida a una nueva especie humana.

En este sentido, el grupo de 18 expertos en ciencia y genética, han suscrito un documento publicado por la prestigiosa revista académica Nature, en el que exhortan a los genetistas a nivel mundial a desistir de las prácticas que incluyan la modificación del ADN hereditario en espermatozoides, óvulos o embriones para obtener como resultado niños modificados genéticamente.

“Esto ya es ilegal en muchos países como España, que firmaron el Convenio sobre Derechos Humanos y Biomedicina –o Convenio de Oviedo– en 1997”, comenta a Sinc Lluís Montoliu, investigador del Centro Nacional de Biotecnología.
En el escrito también criticaron la actitud de quienes tenían conocimiento de las prácticas realizadas por el investigador chino He Jiankui, “y no tomaron medidas adecuadas para pararlo”.
YR