Más de ocho millones de cubanos han sido convocados para participar en el referendo que se celebrará el domingo 24 de febrero en la isla caribeña, para aprobar la nueva Constitución de Cuba que sustituirá a la Carta Magna vigente desde 1976.
El documento legal, previamente aprobado por la Asamblea Nacional del Poder Popular el 22 de diciembre de 2018, condena la intervención extranjera en asuntos internos, los bloqueos unilateriales y la agresión, dando al traste con la enmienda Platt, incoporada por EEUU a través de la Asamblea Constituyente en 1901.
La nueva norma jurídica, según algunos analistas, viene a resarcir el daño ocasionado al pueblo cubano, luego que se cediera a EEUU las tierras de la Bahía de Guantánamo, donde opera la Base Naval estadounidense.
La Constitución calificada como revolucionaria por la investigadora en temas de desarrollo local y territorial del Instituto Nacional de Investigaciones Económicas de Cuba, Lisset Robaina, incluye 760 cambios, dentro de estos 134 artículos modificados y 3 eliminados, lo que representa casi 60% del texto constitucional.
El proyecto cuenta con el respaldo en el exterior de la Alianza Martiana, que agrupa a organizaciones como la Asociación Cultural José Martí, la Asociación de Mujeres en Defensa de la Familia, la Brigada Antonio Maceo y el Círculo Bolivariano de Miami.
YBV