Pese a la crisis generada por el coronavirus, China logró curar de la “neumonía de Wuhan”a 72 personas en las últimas 24 horas y 243 desde el brote viral, cifras con las que espera tranquilizar a la comunidad internacional dividida entre quienes le cierran las puertas y los que le tienden la mano ante el impacto de la enfermedad.
Puede que los números no resulten alentadores para lograr cambiar la visión, pues los muertos suman 259 y el número de infectados en territorio chino asciende a 11 mil 791.
A diario, los medios locales publican imágenes de pacientes a las puertas del hospital despedidos con abrazos de enfermeras y médicos y con ramos de flores, tras haber superado el mal.

Mientras tanto, la Comisión Nacional de Salud explica que los pacientes pueden recibir el alta médica cuando se alivian los síntomas, su temperatura corporal se llega a normalizar durante al menos tres días y la prueba de ácido nucleico muestra negativo dos veces en dos pruebas separadas por 24 horas.
La alarma disparó los rechazos
La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la emergencia internacional el jueves pero recomendó no restringir los viajes al gigante asiático, pero países como EE.UU. prohibieron el ingreso en el país de los extranjeros que hayan visitado China en los últimos 14 días para evitar la propagación del coronavirus.
El Gobierno de Xi Jinping no ha reaccionado ante el anuncio, pero la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Hua Chunying, criticó duramente los comentarios del secretario de Comercio, Wilbur Ross, quien dijo que la propagación del coronavirus acelerará el regreso de los empleos de China a EEUU.
“La Organización Mundial de la Salud se expresó contra las restricciones de viaje, (pero) Estados Unidos se apresuró a ir por el camino opuesto. Ciertamente no es un gesto de buena voluntad”, enfatizó la funcionaria.
Solidaridad internacional
A pesar de lo emitido por Washington y sus representantes, numerosas naciones, empresas e instituciones han mostrado su apoyo al gigante asiático con donaciones de material médico como las 250 mil mascarillas donadas por Boeing o los 10 millones de dólares donados por fundaciones para material de socorro e investigación.
Grandes multinacionales han donado 1,4 millones de dólares a la Cruz Roja China y a las autoridades de Hubei, mientras que la Unión Europea ofreció equipos de emergencia al Gobierno.
China continúa la aplicación de medidas
Mientras tanto, las autoridades de Pekín y las de Wuhan prosiguen la construcción de los dos hospitales que atenderán a 2 mil 500 pacientes, previstos para inaugurar la primera semana de febrero. La tarea se ha llevado menos de diez días.

Asimismo, avanza un plan gubernamental de repatriación de más de 300 ciudadanos residentes en las zonas aisladas de la provincia de Hubei, procedentes de Bangkok (Tailandia), Tokio (Japón) y algunas ciudades de Malasia. Wuhan, epicentro del brote, entre otras de las ciudades provinciales, sigue en aislamiento para contener la expansión del virus.
FF/VTactual.com
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