Desde los tiempos de Tony Blair, la política británica no era tan dependiente de los designios estadounidenses como probablemente lo sea de salir electo en el cargo el conservador Boris Johnson. Admirador de #DonaldTrump, seguidor de su estilo y sometido a sus recetas para salir de la Unión Europea (UE), Johnson parece cada vez más firme en su camino para suceder a Theresa May como primer ministro de Reino Unido.
Boris Johnson es un furibundo impulsor del Brexit. Acata al pie de la letra las “sugerencias” de su mentor norteamericano que recomiendan salir de la UE sin pagar los aranceles solicitados y sin acuerdos con el bloque comercial. #DonaldTrump ha elogiado el estilo pendenciero del líder conservador, a quien los medios de comunicación más poderosos de Gran Bretaña, coquetean complacientes.

Esta semana, Johnson acumuló nuevos apoyos tras recibir un segundo respaldo de un rival que declina a su favor. Se trata de la también conservadora Andrea Leadsom, quien dijo que Johnson es el claro favorito para continuar el proceso Brexit. “Es el mejor posicionado para sacarnos de la UE a fines de octubre”, dijo Leadsom una exlíder de la Cámara de los Comunes que decidió apoyar al que aventaja las encuestas.
Antes lo había hecho el secretario de salud, Matt Hancock, quien también abandonó la contienda para favorecer a Boris Johnson, de quien dijo que es “casi seguro que será el próximo primer ministro”.

Boris Johnson se mantiene favorito en las preferencias con su oferta de retirar a Reino Unido de la UE, con o sin acuerdo, antes del próximo 31 de octubre. Las negociaciones sobre esta materia se han desestimado por el momento gracias a una oferta de libre comercio que el presidente norteamericano ofreció a los británicos, siempre y cuando Johnson sea el nuevo primer ministro.
RB