Está previsto que este domingo el presidente de Argentina, Alberto Fernández, inaugure el periodo ordinario de sesiones del Congreso con una serie de anuncios que marcarán la agenda política de 2020.
Una de ellas tiene que ver con la presentación del proyecto para legalizar la interrupción voluntaria del embarazo, una de sus principales promesas de campaña, y nada exenta de polémica, por cuanto varios colectivos feministas vienen advirtiendo que sólo aceptarán la propuesta de ley elaborada por la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito y no la del Ejecutivo.
Al respecto, la Iglesia Católica también le presionará para que se rechace cualquier iniciativa, y resaltan medios como RT que a Fernández no le resulta conveniente una diatriba con este sector pues con el papa Francisco, firme detractor del aborto, ha conseguido coincidir en otro tema crucial: su posición frente al Fondo Monetario Internacional (FMI) y las facilidades de pago de la multimillonaria deuda adquirida por Mauricio Macri, de la que el propio organismo financiero le ha reconocido impagable.
Todo depende de la renegociación
Si bien hay otros ítems, el Gobierno de Fernández está inmerso en la renegociación de la deuda, porque de ello dependerá el éxito o fracaso de su gestión frente a la crisis económica que dejó su antecesor y que suma cifras récord de pobreza, inflación, endeudamiento y recesión.
Conflicto en ciernes en Argentina
Urgido de recursos, la Casa Rosada anticipó, esta semana, medidas como el aumento de 10% a los impuestos a las exportaciones de soja, algo que para el peronismo resultó largamente conflictivo con el sector en 2008, durante la administración de Cristina Fernández y que en algún momento la distanció del actual Presidente y compañero de partido.
FF/VTactual.com