Este sábado de gloria sorprendió a Indonesia, cuando el volcán Anak Krakatau, entró en erupción en la provincia de Lampung a las 21:58, y durante un minuto y 12 segundos.
Luego se registró una nueva detonación, la más potente, a las 22.35, que se prolongó durante 38 minutos y 4 segundos arrojando una columna de cenizas de 500 metros de altura hacia el norte.
Luego de las dos grandes explosiones, el volcán siguió arrojando ceniza y humo hasta bien entrada la madrugada. La Agencia Nacional de Mitigación de Desastres (BNPB), explicó en un comunicado a primera hora que, «la erupción está dentro del nivel esperado para un área propensa a desastres. Potencialmente podrían ocurrir erupciones, pero no se detectó actividad volcánica que pueda conducir a una mayor intensidad de erupción».
De vuelta a 2018
El poderoso Anak Krakatau, es hijo del legendario volcán Krakatoa que en 2018 generó un tsunami que dejó 431 fallecidos, 28 desaparecidos y 843 heridos, lo que hizo que sus habitantes recordaran ese doloroso episodio este sábado e intentarán salir corriendo de sus residencias.
Sin embargo las erupciones que se registraron en la región de Yakarta, fueron relativamente pequeñas en comparación con las que ocurrieron entre diciembre de 2018.
Este volcán fue descubierto en 1927 y es consecuencia de la gran erupción del legendario Krakatoa, cuya caldera quedó derruida en 1883 tras una serie de masivas explosiones que costó la vida de más de 36.000 personas.
El 26 de agosto de 1883, tras meses de frenética actividad volcánica, el Krakatoa sufrió cuatro enormes explosiones (acompañadas cada una por enormes tsunamis) que provocaron el desplome de la mitad de la isla.
Narkys Blanco/VTactual.com