La despenalización del aborto figura como una de las reformas
al Código Orgánico Integral Penal en Ecuador, esto sólo en los casos de violación, incesto, estupro, inseminación no consentida y malformación del feto, mientras se desarrolla el debate en la Asamblea Nacional los colectivos de mujeres se concentran a los alrededores en defensa de sus derechos.
Entre las cientos de mujeres que resguardan la lucha desde Carla Sánchez del Colectivo «Vivas nos queremos», destaca el caso de niñas violentadas que son obligadas a dar a luz, «Hay que tomar en cuenta la violencia sexual en Ecuador, niñas menores de 14 años terminan siendo madres, pasan por procesos de embarazos forzados que generan un sin fin de problemáticas en un proceso de tortura que las niñas viven».
Pero no sólo las mujeres acompañan la lucha, Carlos Cortez, un ciudadano de a pie que se hace solidario con la causa explica la razón de su apoyo. «Soy padre, tengo hijas, amigas, sobrinas y no quiero que les toque una situación de riesgo y tengan que pagar con cárcel o vida un error con otro, no solidarizarse con las mujeres es dispararse uno mismo. Todos venimos de mujeres, lo mínimo que podemos hacer es estar con ellas».
De acuerdo a cifras de la Fiscalía y los colectivos de mujeres, entre ellos «Fundación Desafío y la Plataforma por la salud y la vida», por lo menos 14 mil mujeres fueron abusadas sexualmente en los últimos tres años, es decir, un promedio de 11 violaciones por día, hecho que ubica a Ecuador como el tercer país en la región con mayor número de embarazos de niñas entre 10 y 19 años, en el caso de los abortos son la tercera causa de muerte materna.
A pesar de las cifras, Jaime Arturo Pallares del colectivo pro vida que va en detrimento del derecho de las mujeres argumenta que no es un asunto de derechos. «Señores asambleístas la responsabilidad está con ustedes no hay aborto seguro! Lo único seguro es que se asesina al bebé», conteniendo en esta afirmación el único argumento de los que se oponen a la despenalización.
EC