Carlos Vecchio, político venezolano que ha sido preparado por el gobierno de EE. UU. – así como a otros actores de la oposición- para ejecutar planes en contra de la Revolución Bolivariana, hoy se encuentra en la cúspide de su carrera como traidor a la Patria tras fraguar el desfalco a su propio país.
Designado como encargado de negocios del autoproclamado Juan Guaidó en EE. UU., Vecchio ahora busca concretar una intervención militar contra el país que lo vio nacer, mientras entrega los activos venezolanos a la administración estadounidense.
Aunque es prófugo de la justicia desde febrero de 2014, el embajador de Guaidó en el país norteamericano ha contado con el apoyo de las autoridades de ese país que lo han incluido en todas las discusiones sobre los posibles escenarios que esperan ejecutar en Venezuela para derrocar al presidente Nicolás Maduro.
El también coordinador del partido de Leopoldo López, Voluntad Popular, viajó entre 2015 y 2016 por varios países de la región latinoamericana como Colombia, Argentina, Brasil y Chile, para preparar el terreno que llevó a Venezuela a la actual crisis que ha acabado prácticamente con su economía.
Entre las reuniones, cuyas instantáneas ha compartido en sus redes sociales, se encuentran varias con el senador republicano, Marco Rubio, uno de los más notables enemigos de Venezuela en EE. UU. Asimismo, cuentan en su prontuario las conversaciones con Mike Pence y la exembajadora de EE. UU. en la ONU, Nikky Haley, quien pedía endurecer las sanciones contra Venezuela.
Gracias al lobby hecho por Vecchio, EE. UU. decidió desconocer las elecciones presidenciales del 20 de mayo de 2018 en las que el presidente Nicolás Maduro resultó vencedor. Igualmente, es uno de los responsables de que Venezuela perdiera Citgo, filial estadounidense de Petróleos de Venezuela que era uno de los principales objetivos de la oposición.
A pesar de su activa participación como aliado del gobierno de EE. UU. en los ataques contra Venezuela, hoy Vecchio es investigado por el Departamento de Justicia de ese país por alterar los libros contables de Citgo para el pago de supuestos bonos 20-20.
ARG
