El presidente de la República de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró que los crímenes que han cometido los grupos violentos financiados por la derecha no pueden ser tapados con la religión o con supuestos actos de fe.
El Mandatario dio esta declaración al referirse a la movilización que realizó la oposición venezolana en zonas del este de Caracas, la cual denominaron «la marcha de la fe» y donde presuntamente pretendían rezar por las víctimas de los sucesos violentos registrados durante los meses de abril, mayo y junio.
De acuerdo con una investigación realizada por el Ministerio de Comunicación e Información, 80 personas han perdido la vida durante las protestas terroristas de la derecha hasya el 06 de junio. Más 50 de esas personas fueron asesinadas sin formar parte de las manifestaciones.
Además, durante las marchas opositoras, donde grupos fascistas portan armas artesanales, escudos, máscaras y otros implementos para la guerra, varios jóvenes fueron incendiados vivos tras ser confundidos con chavistas.
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Dijo que en todos estos años, con un proceso revolucionario asediado de manera permanente, «pudiéramos decir que la Revolución pudo tomar decisiones medidas y mantener una dinámica, esencialmente evolutiva (…) Una evolución en el marco de una Revolución».
Recordó que las primeras guarimbas (acciones de calle violentas), dirigidas por Henrique Capriles, actual gobernador del estado Miranda por Primero Justicia, fueron controladas con las primeras acciones. «Mas temprano que tarde, Capriles pagará por los crímenes cometidos, no olvidemos los 11 muertos cuando ese señor llamó a descargar la arrechera (rabia) en abril de 2013», dijo el Presidente.
NM