El Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia espera que los países occidentales no participen en ningún intento de Ucrania de organizar lo que calificó de “provocación” cerca del estrecho de Kerch y que convenzan a Kiev de evitar tensiones en la zona.
Ucrania dijo la semana pasada que planea enviar buques de guerra a sus puertos del mar de Azov a través del estrecho de Kerch, a pesar de que Rusia capturó tres buques y sus tripulaciones en el área en noviembre.
La respuesta de Moscú también surge a propósito de la visita, la semana pasada del ministro de Defensa británico, Gavin Williamson, a Ucrania, durante la cual dijo a su homólogo ucraniano que el mar Negro no pertenece a Rusia y que Reino Unido envió un barco a la zona para demostrar que el gobierno de Kiev no está solo.
La acción que detonó la respuesta rusa
Cabe recordar que el 25 de noviembre pasado el Servicio Federal de Seguridad de Rusia denunció que los buques ucranianos Berdiansk, Nikopol y Yany Kapu ingresaron ilegalmente en aguas territoriales rusas y violaron la frontera nacional, razón por la que la nación euroasiática disparó y se apoderó de las tres embarcaciones frente a la costa de Crimea.
Se trataba de dos cañoneras y un remolcador que resultaron capturados tras una persecución en la que tres tripulantes resultaron heridos, situación por la que Kiev acusó a Rusia de agresión y el presidente ucraniano, Petró Poroshenko, firmó un decreto para aplicar una ley marcial, aprobada por el parlamento al día siguiente.
Fin de la ley marcial
No obstante, para la jornada de este 26 de diciembre, Poroshenko anunció el fin de la Ley Marcial: «A las 14:00 horas expiró el estado de excepción. Es mi decisión. Se basa en todos los elementos de la actual situación de seguridad del Estado».
Aún así, el mandatario ucraniano alega que «la amenaza rusa» no ha cesado: «Me gustaría subrayar que la amenaza rusa no se ha ido a ninguna parte. Seré sincero: si no llega a ser por las elecciones, hubiéramos pedido a la Rada Suprema [Parlamento] continuar con el estado de excepción», acción que incluyó medidas como la movilización de tropas hacia la frontera y los puertos bañados por los mares Negro y Azov y la restricción de entrar al país a varones rusos en edad militar.
FF