Seis días han pasado desde la caída del niño Julen en un pozo de más de cien metros en Totalán (Málaga), y los equipos de rescate se emplean contra reloj toda vez que trabajan desde el domingo en las labores y comenzaron a perforar, este sábado, desde la 1:35 de la tarde española, un túnel para intentar llegar al pequeño si no encuentran nuevos obstáculos.
Se trata de un túnel vertical que, a esta hora, alcanza los 21 metros de los cerca de 60 de profundidad que se requieren para llegar a donde se dice que está la criatura.
Se espera que esté terminado antes del amanecer de este domingo y, una vez alcanzada la altura en la que se calcula que está el niño, será conectado manualmente con el pozo por el que se precipitó.
Trabajo titánico por Julen
Exponen medios españoles que el trabajo se perfila titánico, por la rapidez con la que se necesita excavar, en una operación en la que participa un centenar de efectivos y para la que el pasado viernes llegó al poblado malagüeño una potente perforadora.
Los Bomberos de Málaga crearon una cápsula metálica de dos metros de altura para efectuar el rescate de Julen, una vez concluida la excavación de la galería horizontal en la que trabajan los mineros trasladados desde Asturias.
Una hora después del inicio de la excavación, a las 2:45 de la tarde, el nuevo presidente andaluz, Juan Manuel Moreno, quien tomó posesión del cargo la noche de este viernes, sostuvo una reunión con los responsables del operativo de rescate y después concurrió a la casa donde se encuentra la familia desde anoche.
FF