No es un secreto para nadie que todos los hilos que se mueven sobre la cabeza de Juan Guaidó, son manejados desde Estados Unidos, que fue el primer gobierno que reconoció la ilegal autoproclamación del diputado inhabilitado por la justicia venezolana.
Desde la Casa Blanca se siguen de cerca las acciones que aspiran sacar al presidente Nicolás Maduro del poder por la vía del golpe de Estado. “El presidente (Trump) ha sido informado y estamos atentos a la situación en desarrollo”, dijo Sarah Sanders, secretaria de prensa de la Casa Blanca.
La nueva aventura de Guaidó
La calle se le enfrió. El dirigente político autoproclamado presidente de Venezuela, Juan Guaidó, quedó mal tantas veces ante sus seguidores, que perdió la mayoría de la gente que le apoyaba en las nutridas concentraciones que convocaba. La etiqueta #NoMarchamosMasGuaido, se posicionó en las redes por opositores venezolanos que, cansados de tanto engaño, desistieron de acompañar al autoproclamado a su más reciente convocatoria a marchar el 1 de Mayo.
Ante este escenario, la necesidad de motivar la salida de gente a la calle era necesaria y qué otra cosa llamaría a movilizar al pueblo que un show. Para ello, un grupo de militares traidores se prestaron, quien sabe a qué costo, a liberar al dirigente político Leopoldo López, quien junto a Guaidó, se tomó fotos y grabó videos para llamar al golpe de Estado y a la rebelión popular.
La rápida acción de los organismos leales a la constitución venezolana y a la paz de la nación, controló la situación en tiempo récord, con la captura de dos tanquetas de la Guardia Nacional Bolivariana, que fueron robadas esta madrugada por los militares golpistas.
RB