Los presidentes de España y Francia, Pedro Sánchez y Emmanuel Macron, reafirmaron en La Moncloa, en Madrid, su alianza para facilitar “una mayor integración de la Unión Europea” y encarar el actual desafío migratorio.
El documento de ocho puntos está lleno de “buenas intenciones” que recuerdan las tesis ya consensuadas con el resto de países de Europa de promover con organizaciones internacionales especializadas una reunión con los países de África occidental, para analizar los nuevos flujos y explorar posibles iniciativas comunes.
Macron mantiene la idea de crear «centros cerrados» dentro de territorio europeo donde mantener a los inmigrantes hasta determinar cómo y cuántos se podrían repartir entre los países miembros de la UE sin provocar más crisis políticas internas.

España considera que es necesario priorizar la búsqueda de pactos con los países de origen y tránsito. Recordemos que en 2006 el país europeo sufrió la gran crisis de los cayucos en Canarias (llegaron 39 mil inmigrantes) y alcanzó acuerdos para conceder ayudas millonarias a Senegal y Mauritania.
La cita de los presidente e España y Francia coincidió con un repunte de los saltos de migrantes a la valla en Ceuta y de pateras en las costas de Andalucía.
En el Gobierno de Sánchez no quieren relacionar este aumento de los flujos temporales de emigración a algún hipotético problema diplomático con Marruecos.
ER
Leer más: