A través de un comunicado, emitido por el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el grupo insurgente se adjudicó el ataque perpetrado el pasado 17 de enero del presente año, en las inmediaciones de la Escuela General Santander, al sur de Bogotá, Colombia, que dejó al menos 21 fallecidos y 68 heridos.
De igual forma, precisó que el hecho responde a las recientes acciones impulsadas por el presidente colombiano, Iván Duque, quien a su consideración no valoró el gesto de paz que tuvo el grupo insurgente el pasado mes de diciembre, cuando aseguró que levantaría las actividades de confrontación por la temporada decembrina.
“Su respuesta fue realizar ataques militares en contra nuestra, en todo el territorio nacional. Pese a ello, cumplimos rigurosamente el cese unilateral de operaciones ofensivas entre el 23 de diciembre de 2018 y el 3 de enero de 2019”, señaló el texto.
Pese a la negativa por parte del mandatario colombiano a retomar la mesa de negociaciones con el grupo insurgente, el ELN reiteró su disposición en darle continuidad al Proceso de Paz, en la Habana, Cuba, que se había iniciado por el Gobierno anterior.
Asimismo, el ELN precisó que el ataque ocurrido en Bogotá, corresponde a una “operación ilícita” dentro del derecho de la guerra, ya que en su opinión no hubo ninguna víctima que esté exenta del conflicto que libra el grupo con el Gobierno.
YR