Con el dólar disparado, la canasta básica incomprable y el riesgo país en 1000 puntos, Mauricio Macri se enfrenta a una estrepitosa caída en los próximos comicios, aún y cuando asegura que su gestión está haciendo “lo que hay que hacer” y que la estabilidad de la economía se debe a una simple desconfianza del mercado.
Sin embargo, diferentes especialistas argentinos consideran que la crisis está muy lejos de finalizar y que su profundización se deberá sobre todo al temor de los ciudadanos que no terminan de confiar en el manejo político y económico de la gestión de Macri.
Pero quienes resultan más afectados con las políticas aplicadas definitivamente son los argentinos, que necesitan más de 11 mil pesos para poder adquirir los requerimientos calóricos necesarios para sobrevivir durante un mes, casi la totalidad del sueldo mínimo que a la fecha es de 12 mil 500 pesos.

Esto deja a los ciudadanos que no tengan ingresos adicionales, sin posibilidad de costear otras necesidades como vivienda, salud, ropa, calzado y entretenimiento. Desde que Macri llegó al poder, el valor del dólar frente al peso ha aumentado 370,3 por ciento.
Nada han podido hacer las medidas de «alivio» para el corto plazo, entre ellas, el acuerdo con las empresas alimenticias para mantener congelados 64 productos hasta las elecciones, programa que aún no llegó a los supermercados y que los empresarios ataron a la estabilidad de las variables económicas.
ARG