La Universidad Católica Argentina (UCA) reveló que durante el año 2018 la pobreza aumentó 4,7 por ciento en el país sureño, alcanzando al 31,3 por ciento por ciento de la población urbana.
Según la medición realizada por el Observatorio de la Deuda Social de la UCA el año pasado se produjeron 1.903.500 nuevos pobres lo que deja un saldo total de 13,6 millones de personas en esa desfavorable situación.

La cifra de pobreza alcanzó su valor más elevado desde 2010 debido al deterioro socioeconómico provocado por la crisis cambiaria y financiera que azota al país gobernado por el conservador Mauricio Macri.
“La pobreza crece en Argentina y es obvio en un contexto donde aumenta la inflación, se profundiza la recesión económica, se achica el mercado interno y el gasto público”, afirmó el jefe del Observatorio de la Deuda Social, Agustín Salvia, consultado por Pagina 12.
Unas 16 mil 500 personas descendieron a la condición de indigencia y en total 2,47 millones cuentan con ingresos inferiores al valor de la canasta básica de alimentos, de acuerdo a la pesquisa.
El texto reveló que el 18,6 por ciento de la población cayó al núcleo de pobreza estructural, hogares donde se registran carencias en la mitad de las dimensiones medidas, entre ellas destaca los hogares con dificultades alimentarias o de atención sanitaria, que pasaron del 21,6 por ciento a 22,8 por ciento en 2018.
La situación se agrava en la Gran Buenos Aires, el llamado conurbano bonaerense que alberga el 40% de la población del país. Allí la cifra de pobreza trepa al 41,1 por ciento.
Según cifras de la Dirección General de Estadísticas y Censos de la capital argentina, en la ciudad se duplicó la cantidad de indigentes en los últimos tres años.
Si en el último trimestre de 2015 había 100 mil personas bajo la línea de indigencia en el último trimestre del año pasado se contabilizaron 198 mil, 98 por ciento más.
Para el año 2019 se espera una significativa desmejora de las cifras debido a los llamados “tarifazos” (aumentos desproporcionados de los servicios públicos), el incremento de la inflación, la devaluación del peso frente al dólar, además de alzas en la canasta básica alimentaria y otros rubros esenciales.
En este sentido, ya Salvia adelantó que el comportamiento del primer trimestre de 2019 pronostica otro año “complicado” para Argentina, año en el que se estima se siga acentuando la depauperación social.
YBV