La República de Colombia atraviesa su segunda gran devaluación en menos de cinco años. Entre 2014 y 2019 el dólar ha pasado de $2.000 a $3.500, y seguiría subiendo, según análisis de expertos en economía colombiana.
El país neogranadino, a pesar de no sufrir medidas coercitivas y unilaterales de la mano de EE.UU. como su vecino Venezuela, y contando con el pleno respaldo del gobierno norteamericano, hoy sobrepasa la tasa de cambio más alta del 2019, cuando la divisa pasó de los $2.000 y supera los $3.000, llegando incluso a los $3.440 (registrado el 11 de febrero de 2016, el récord anterior a los máximos de los últimos meses).

Tal como la guerra financiera de su vecina Venezuela, el dólar superó la barrera de los $3.500 (cerrando en $3.495). Se trata de un hito que confirma que Colombia está viviendo otro gran período de devaluación, que podría ser tan severo como el que se vivió entre 2014 y 2016.
Esta es la segunda devaluación que se empezó a sentir con fuerza desde la primera semana de agosto de 2019 , lo que se puede traducir como una reacción a la incertidumbre internacional. La guerra comercial que libran Estados Unidos y China, los inesperados resultados de las elecciones primarias en Argentina, el riesgo de un brexit sin acuerdo y la inestabilidad política en Perú, son algunos de los casos que mantienen tensa la economía mundial.
La incertidumbre internacional es un problema para Colombia, pues provoca que los inversionistas migren hacia activos más seguros, como el dólar o el oro, y se salgan de los riesgosos como los activos de las economías emergentes como la colombiana.
XC