Muchas personas se manifestaron este miércoles 4 de marzo a través de Twitter con la etiqueta #NoAlMaltratoAnimal, en protesta por un video que se dio a conocer por esa y por otras redes sociales, en el que dos individuos maltrataban y golpeaban duramente a un perro, a través de la reja de una casa. Según la versión que circula en redes sociales, el hijo de uno de los hombres había entrado a la casa donde estaba el perro a buscar una pelota que se le había caído allí, y el animal presuntamente lo atacó. Los dueños de la casa, al parecer, no se encontraban.
En el video, se observa a varias señoras exigiéndole a los hombres dejar al perro tranquilo, pero ellos afirmaban que el animal había mordido al muchacho, razón por la cual se merecía el maltrato y el escarmiento. “¿Qué hubiera hecho usted si el perro mata al muchacho?”, le preguntaba el hombre a la señora. “¡El perro no tiene la culpa!”, respondía la doña.
Los hechos ocurrieron en la población venezolana de Zaraza, estado Guárico. Este miércoles Jumarly Fonseca, la alcaldesa de la localidad, informó en Twitter: “Anoche, aproximadamente a las 12:00 am, detuvimos a los implicados en el caso del vídeo que se ha hecho viral en las redes sociales. Gracias a eso pudimos conocer de este caso. ¡Habrá justicia contra quienes, sin escrúpulos, atentaron contra la vida de este ser de luz!”. Un periodista de sucesos guariqueño confirmó que los hombres fueron detenidos por la Guardia Nacional Bolivariana y serán presentados ante el Ministerio Público.
“Esta situación nos da un alerta y nos obliga a la prevención y tratamiento de estos casos para que no sean cotidianos en la sociedad”, señaló la alcaldesa.
El perro, un animal mestizo de tamaño mediano de nombre Nerón, fue trasladado a la sede de Misión Nevado Guárico, informó la misma alcaldesa (Misión Nevado es un programa del gobierno venezolano para ayudar a las personas en la atención de animales de compañía). Dicha institución emitió un comunicado en Instagram señalando que el animal estaba bajo sus cuidados, “con pronóstico reservado”. Hay que destacar el trabajo conjunto entre vecinos e instituciones públicas guariqueñas para castigar a los maltratadores y proteger al animal agredido.
Al margen de la ira comprensible que pueda sentir cualquier persona si un perro atacó a su hijo o hija, no puede culparse a un animal por las acciones o daños que haya causado. Ante las leyes, el propietario de un animal de compañía tiene que tomar las medidas necesarias para que no perjudique a otras personas, y es el responsable de cualquier daño que cause a terceros o a propiedades. Dicha persona tiene que dar la cara, responsabilizarse legalmente y reparar cualquier daño. En Venezuela, así lo señalan los artículos 23 y 24 de la Ley de Protección a la Fauna Domestica, Libre y en Cautiverio.
Aunque también habría que notar que, en este caso en particular y de ser cierta la versión que corre en redes sociales, el perro estaba protegiendo la casa en la que reside, y no es su culpa que alguien ingrese en ella sin autorización de sus dueños.
Al respecto, la ley antes mencionada, en su artículo 25, recomienda interponer denuncias ante el Consejo Comunal, la autoridad parroquial o el juez de paz como medidas para buscar conciliación y exigir solución a los problemas que pudiera causar el animal de compañía de algún vecino. Por otro lado, hay que reiterar que, según los artículos 71 al 73 de la mencionada ley, el maltrato animal y la crueldad animal son delitos muy graves, que se castigan fuertemente.
Los seres humanos presumimos de que somos la especie superior del planeta, aún cuando también somos responsables de la destrucción del ambiente, de la extinción de numerosas especies y de muchos otros hechos bochornosos que ningún animal “salvaje” sería capaz de cometer.
Si de verdad somos la especie superior, empecemos a demostrarlo resolviendo entre nosotros los humanos los problemas y conflictos que podamos causarnos, producto de tener animales de compañía. Recordemos que, hace miles de años, sus antepasados “salvajes” caminaban libremente por la naturaleza, en las selvas, bosques y sabanas.
Los humanos de aquel entonces los domesticaron y los convirtieron en lo que son ahora. Por ende, si decidimos tener animales domésticos, los problemas que ocasione su tenencia debemos resolverlos entre nosotros los humanos y no culparlos a ellos ni mucho menos causarles sufrimiento, pues ellos no comprenden cómo funciona nuestra compleja sociedad, ni tienen por qué hacerlo.
Nadesjka Landaeta /VTMascotas