Con el objetivo de aumentar las cifras de inmigrantes deportados, la administración de Trump ha decidido romper un antiguo acuerdo bilateral de 2008, deteniendo a ciudadanos vietnamitas en refugios prolongadamente.
Después de la guerra de Vietnam, miles de vietnamitas que habían sido aliados norte americanos, llegaron a Estados Unidos en busca de protección, con el paso de los años cerca de 10,000 inmigrantes recibieron una orden de deportación después de haber sido declarados culpables de crímenes de guerra en los tribunales americanos.

El gobierno Vietnamita asegura que estos refugiados eran enemigos políticos o posibles espías estadounidenses. Ésta política cambió en 2008, cuando el presidente George W. Bush llegó a un acuerdo según el cual Vietnam aceptaría el regreso de los deportados que habían llegado a los Estados Unidos después del 12 de julio de 1995.
No es un dato menor, que el país donde hay más Vietnamitas, después de Vietnam, es Estados Unidos, sin embargo, el gobierno Trump argumenta que el tratado no aplica si los refugiados vietnamitas han cometido actos que los hacen inelegibles para permanecer en la nación norteamericana.
Los defensores de los refugiados y abogados dicen que la postura de Trump va en contra del acuerdo. Actualmente se ha deportado 11 refugiados vietnamitas que llegaron a EEUU antes de 1995, y otros cientos continúa presos.
OSM