El Gobierno de #DonaldTrump incrementa la paranoia entre los habitantes de #EEUU luego que cerca de 225 millones de usuarios de telefonía celular recibieran un mensaje como parte de una prueba a nivel nacional de un nuevo sistema de alertas.
«Alerta presidencial: ESTA ES UNA PRUEBA del Sistema Nacional Inalámbrico de Alertas de Emergencia. No es necesaria ninguna acción«, rezaba el mensaje de texto en inglés, que llegó alrededor de las 12:20 del miércoles 3 de octubre.
Para algunos ciudadanos norteamericanos esta práctica representa una violación a los derechos civiles, por lo que Jason B. Nicholas, Kristine Rakowsky y Liane Nikitovich presentaron una demanda legal ante la Corte de Distrito del Sur de Nueva York.
La querella contra el presidente de EEUU y William B. Long, administrador de la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA), está basada en afirmar que el nuevo sistema “es una violación de la Primera y Cuarta Enmienda de los derechos de los americanos de ser libres de no escuchar de forma obligada al Gobierno”.
Otra de las personas que se muestra en desacuerdo con el mensaje es Ana Reza, del estado de Texas, asegurando que su privacidad ha sido violentada. “Cuando recibimos estas alertas en la televisión está bien, ya que estos mensajes no están conectados a nuestros teléfonos celulares, los cuales cargamos a todas partes, y donde yo almaceno información importante, o algunas cosas que no deseo que alguien más se entere”, sostuvo.
La implementación de los mensajes presidenciales a través del Sistema Nacional de Emergencias fue acordado en el año 2012, pero fue hasta ahora que la administración presidencial los puso en función, creando una controversia que incluso ha llegado a la justicia de ese país.
NP