Luego de que el huésped de la Casa Blanca, #DonaldTrump anunciara la salida de EE. UU. de Siria y abandonara a los aliados kurdos, a quienes Turquía comenzó a bombardear este jueves, senadores demócratas y republicanos anunciaron la creación de un proyecto de ley que tendrá como objetivo aplicar sanciones a Turquía.
El anuncio fue hecho este jueves por uno de los senadores más fieles -hasta este momento- a la gestión del Primer Mandatario estadounidense, Lindsey Graham, quien después del anuncio de la retirada de tropas de Siria se convirtió en el principal detractor de la política exterior del actual Gobierno de EE. UU.
En efecto, no sólo Graham ha criticado la decisión de #DonaldTrump, también buena parte del Partido Republicano rechazó la reciente resolución, causando una fractura nunca antes vista en el partido gobernante.

Entre las sanciones que impondrían contra Recep Tayyip Erdogan, que en realidad afectarán en líneas generales a la sociedad turca, figuran medidas restrictivas contra el sector energético de Turquía y prohíbe vender suministros estadounidenses como municiones, servicios y tecnología a las Fuerzas Armadas del país asiático.
Por su parte, el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU), debatirá las posibles consecuencias de la ofensiva turca, que el gobierno de Erdogan había anunciado desde agosto cuando consideró que la falta de consenso de EE. UU. sobre la situación en el noreste de Siria, zona controlada por terroristas entrenados por fuerzas estadounidenses, ponía en peligro su territorio.
ARG