El ministro ruso de Defensa, Serguei Shoigu, denunció el martes que la oposición armada en Siria recibe continuamente armas del extranjero desde que iniciara el conflicto en el país árabe.
«Todo este tiempo las unidades de la oposición armada y los grupos mercenarios cuentan con el suministro ininterrumpido de municiones, armas y otros materiales del extranjero para realizar acciones militares intensas», indicó Shoigu.
El funcionario ruso, sin hacer mención de su fuente informativa, aseguró que durante los conflictos internos en Siria, Iraq, Yemen y Libia, los grupos armados ilegales recibieron unos 2.450 sistemas portátiles de defensa aérea, 1.750 sistemas antitanque, 650 lanzacohetes múltiples, más de 24.000 proyectiles de distintos tipos y más de 600 toneladas de explosivos.
Poco antes de que el expresidente Barack Obama dejara el cargo, firmó en diciembre pasado un decreto para levantar el embargo de armamento a grupos irregulares en Siria, así como para permitir el financiamiento de las tropas ilegales que luchan por sacar del poder al mandatario sirio, Bashar Al Assad. La primera vez que Obama hizo algo similar se remonta al año 2013, cuando decidió enviar armas a la oposición siria en un claro gesto de injerencia contra el país árabe.
En ese sentido, el gobierno ruso ha criticado la acción, argumentando que las armas terminarán en manos terroristas, como ya ha ocurrido en el pasado con el Estado Islámico, o como cuando el gobierno armó a los muyahadines para que lucharan contra la Unión Soviética en los años ochenta en Afganistán. Luego de la disolución del bloque comunista, los irregulares se convirtieron en Al-Qaeda.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto armado en el que grupos armados de la oposición y terroristas luchan contra el Gobierno legítimo de Bashar Al Assad.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) arroja que entre 300.000 y 400.000 personas murieron en la guerra.
Con información de Sputnik y Europa Press.
JA