Después del reciente caso que involucró a Facebook y el uso de datos de más de 50 millones de sus usuarios por parte de un tercero, muchos usuarios comenzaron a preguntarse cómo deben hacer para cuidar su privacidad. Especialistas en seguridad informática explican qué tipo y cantidad de información se comparten en algunas de las redes sociales más utilizadas.
Aplicaciones en Facebook desarrolladas por terceros
Facebook permite que otros desarrolladores utilicen la red social para agregar funcionalidades adicionales. Para comprobar si el usuario ya está utilizando aplicaciones desarrolladas por terceros, solo debe ir a la opción “Configuración” y luego pinchar en la opción “Aplicaciones”. Una vez allí se puede ver el listado de aplicaciones de terceros que han aceptado dentro de su perfil. Por último, al hacer clic sobre cada una de las aplicaciones, se puede saber cuál es la información del usuario a la que tiene acceso la aplicación.
Vale aclarar que en caso de que el usuario desee borrar alguna aplicación, la información que ya se ha compartido con la empresa desarrolladora podría quedar en sus servidores. En ese caso se deberá verificar específicamente cuáles son las políticas de cada desarrollador y en caso de que algo no esté de acuerdo a lo que espera el usuario, ponerse en contacto con la empresa para pedir que borren la información.
Otras redes sociales, similares comportamientos
Si bien Facebook es la red que ha estado en el ojo del huracán por todo el escándalo que se generó, hay otras redes sociales que también permiten que aplicaciones de terceros sumen funcionalidades a la experiencia del usuario a cambio de cierta información de los usuarios.
En el caso de Instagram, por ejemplo, se puede entrar desde un navegador a la cuenta y en la sección de la configuración “aplicaciones autorizadas” se encontrará el detalle de los permisos que como usuario otorga para acceder a cierta información personal; y la posibilidad de revocar el acceso a la misma.
Con Twitter ocurre algo muy similar, ya que en la parte de configuración de la cuenta es posible acceder a la información de las aplicaciones que tienen acceso a la información.
Esta situación no solo toca a las redes sociales sino que también hay aplicaciones de terceros que buscan agregar funcionalidades a la experiencia como usuarios y que pueden estar obteniendo datos. Un caso de esto son los navegadores.
Dos de los más populares, Firefox y Chrome, permiten descargar Extensiones, las cuales piden permisos al momento de instalarse. En el caso de Firefox, antes de instalar alguna de esas extensiones desde la tienda oficial Firefox Add-ons, permite ver al final de la página los permisos que solicita. Una vez instalados, en la opción Administrador de complementos se pueden ver todos los que están activos.
En Chrome, antes de instalar una Extensión se muestra la información a la cual el usuario permite acceder una vez que haga clic en “añadir extensión” desde el Chrome Web Store.
“Más allá del caso puntual de Facebook, es importante que como usuarios tomemos consciencia de la gran cantidad de información que compartimos todo el tiempo. El hecho de estar navegando por Internet, de tener un celular también conectado a la red, una aplicación de mensajería o cualquier otro servicio ya implica que estamos entregando algo de nuestra información, y la realidad es que nuestra vida cada vez va a estar más conectada con la creciente cantidad de dispositivos”, reflexiona Camilo Gutierrez, jefe del Laboratorio de Análisis e Investigación de Eset Latinoamérica.
Con información de El Mundo