Más de siete siglos de historia y cultura fueron consumidos este lunes por las llamas cuando un incendió presuntamente vinculado con trabajos de remodelación de la estructura, se inició en la famosa catedral de Notre Dame, ubicada en el centro de la ciudad de París, Francia.
La edificación, que albergaba a un grupo de turistas al momento de haberse declarado el incendio, poco antes de las 19:00 horas, se comenzó a construir con piedras y madera a mediados del siglo XII. Las características de estos materiales y la altura de la estructura, dificultaron el control del siniestro, puesto que el uso común de agua hubiese podido provocar un peligroso derrumbe.
De acuerdo con las autoridades sólo hay un herido producto del incendio: uno de los más de 400 bomberos que lucharon durante horas por aplacar el voraz siniestro que pudo haber acabado con al menos dos de los tesoros más valiosos para el cristianismo: un trozo de la cruz dónde pudo haber sido crucificado Jesús, así como uno de los clavos que utilizaron para clavarlo en ella.
Otras obras de gran envergadura, que por su peso y tamaño no pudieron ser movilizadas por los rescatistas -como por ejemplo la monumental Piedad que preside el ábside de la catedral, esculpida por Nicolas Coustou en el siglo XVIII y el órgano de la iglesia, obra de Aristide Cavaillé-Coll que cuenta con unos ocho mil tubos y una caja adornada con autómatas- también se encuentran entre las perdidas lamentables que pudo haber dejado el fuego.
A través de los medios, millones de personas pudieron observar cómo se venía abajo la aguja de 93 metros construida por el arquitecto Eugène Viollet-le-Duc, en la última ampliación hecha a la estructura cuya duración fue de dos décadas y que dejó como otro de sus legados las famosas gárgolas que coronaban el recinto.
Ante el hecho, el presidente Enmanuel Macron se ha mostrado conmocionado. De inmediato, llamó a los ciudadanos franceses y a la comunidad internacional a unirse en la reconstrucción de la catedral, al tiempo que abrió una colecta para recaudar fondos con el objetivo de recuperar la edificación.
Cerca de las 23.00 horas del lunes, los bomberos han afirmado que la estructura del edificio «está salvada en su conjunto». Además, se ha logrado rescatar parte del tesoro, como la corona de espinas de Jesús y la túnica de San Luis.
ARG