La ministra Dolores Delgado se mantiene en el ojo del huracán por las grabaciones filtradas durante una reunión en 2009 con el comisario encarcelado José Villarejo y el exjuez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón.
Este miércoles la mancloa.com reveló nuevos audios en los que Delgado deja oír las conversaciones durante el encuentro de jueces y fiscales con menores de edad en un viaje a Cartagena de Indias, Colombia, lo que se suma a la grabación donde chistea sobre la orientación sexual del hoy ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, diciendole “maricón”.

El martes los partidos derechistas Ciudadanos, Partido Popular (PP) y Foro Asturias, lograron aprobar una moción en el Congreso para destituir a la ministra de Justicia, sin embargo Dolores ha dicho hoy en el senado que ni ella ni el gobierno de Pedro Sánchez se dejarán chantajear.
«No voy a dimitir (…) No me he achantado con narcotraficantes, ni terroristas, ni corruptos y violadores de los DDHH. Me he mantenido firme. Ni este Gobierno ni esta ministra va a aceptar el chantaje de nadie«, advirtió, mientras que el PP la señalara de ser “un paradigma de la mentira”.

Delgado ha intentado presentarse como una víctima en las grabaciones que hablan por si solas, inicialmente había asegurado no haber tenido «relación de ningún tipo» con Villajero, pero tras quedar en evidencia, reconoció haber coincidido en al menos tres ocasiones «a lo largo de los 25 años en que ha trabajado en la Fiscalía de la Audiencia Nacional».
Sin embargo, en los audios divulgados se le escucha hablar con mucha familiaridad y confianza.
NA