El departamento de Nariño reportó dos asesinatos de líderes sociales en menos de una semana, lo que pone en tela de juicio la capacidad de respuesta en el tema de seguridad del Gobierno que preside Iván Duque, durante el cual parece imparable este flagelo.
Una de las víctimas fue Lucy Villareal, lideresa social de Tumaco, en Nariño, cuyo asesinato ocurrió el 23 de diciembre, justo después de que la mujer salía de impartir un taller para niños y coordinar la exposición «Mujeres, Sur y Vida», que resalta a lideresas y defensoras de DD.HH. en esa nación.

Con 69 por ciento de desaprobación a nivel nacional, Iván Duque no ha avanzado en temas como la educación, el desempleo, la inflación y la inseguridad, así como el asesinato sistemático de líderes sociales y excombatientes.
El país neogranadino tiene un mes inmerso en masivas manifestaciones que exigen el cambio de modelo que intensifican la desigualdad social.
Según información del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), en el mes de agosto 229 líderes sociales fueron asesinados, lo que se calcula en el año con más de 400 líderes aniquilados, la cifra más alta en el sector en la historia de Colombia.
Xica/VTactual.com
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