En Estados Unidos la actual administración del gobierno respalda una demanda de estudiantes asiáticos-americanos contra la Universidad de Harvard por la aplicación de discriminación positiva en su proceso de admisión.
El departamento que dirige Jeff Sessions, apoya a un grupo de estudiantes para revertir las políticas adoptadas por el expresidente Barack Obama, que fomentan la diversidad racial en las universidades.
Este conflicto tienen como origen una demanda presentada en 2014 ante un tribunal federal en Boston, por una organización sin fines de lucro, integrada por estudiantes asiáticos a los que Harvard les negó la admisión para favorecer a alumnos negros y latinos.
El organismo exige que se sigan en el proceso de selección de las solicitudes métodos que sean neutros y centrados en los méritos de los estudiantes.
El Gobierno de Trump, caracterizado por sus políticas antiinmigrantes y racistas, considera que las pruebas presentadas por los demandantes muestran que los procedimientos de discriminación positiva del centro para favoreces a latinos «son ilegales».
A mediados de junio de 2017 la Universidad de Harvard revocó la admisión de al menos diez alumnos que iban a formar parte de la promoción de 2021 por compartir a través de un chat exclusivo de Facebook contenido, memes y mensajes, explícitamente sexual y racista contra grupos minoritarios.
EC
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