Un total de 14 guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que abandonaron los Acuerdos de Paz han sido asesinados hasta el momento, luego de que el Gobierno de Iván Duque anunciara una ofensiva para capturar a quienes ahora considera delincuentes, pese a que su gestión es en parte culpable del surgimiento de esta disidencia.
La operación tuvo lugar en un municipio del departamento del Caquetá, que fue bastión en el pasado de esa guerrilla. Según informaciones difundidas por las autoridades, en el hecho fue abatido uno de los lideres de la organización, conocido con el alias de «Gildardo Cucho».
Se estima que cerca de mil 800 personas forman parte de los 24 grupos de disidentes de las FARC que se apartaron del proceso de paz.
Sin embargo, no se tiene conocimiento de que estén directamente involucrados con el grupo de exlíderes que encabeza alias Iván Márquez, quien anunció el pasado jueves su regreso a las armas.
Luego de la noticia se conoció que el Estado conforma un grupo especial de militares, con capacidades reforzadas, que se avocará a perseguir a los disidentes, a quienes se les revocaron los beneficios especiales otorgados a través de la Jurisdicción Especial para la Paz.
ARG