¿Y qué está haciendo el Gobierno mexicano para la reinserción de los privados de libertad? Parece que no mucho. En las redes sociales está circulando un video que muestra a los presos de Apodaco- una ciudad mexicana- vestidos con ropa de mujer y haciendo labores de limpieza humillantes.
En el video, se observa como los otros convictos golpean y maltratan verbalmente a los más débiles, quienes solo portan ropa interior de mujer, mientras limpian el piso con sus manos al ritmo de las burlas e insultos de los pranes (jefes de celdas o grupos.)
En tanto, al parecer el Gobierno de Nuevo León, Apodaco, México informó que en cuanto se tuvo conocimiento de los hechos se implementaron una serie de acciones en el centro de internamiento y ordenó realizar todas las investigaciones e indagatorias para aclarar los hechos.
Aquí mostramos el vergonzoso momento al que fueron sometidos los privados de libertad:
http://www.eluniversal.com.mx/video/estados/2017/03/15/difunden-vejaciones-reos-vestidos-con-lenceria-de-mujer-en-topo-chico
Esta situación representa un nuevo escándalo para el sistema penitenciario de México, el cual se encuentra bajo la lupa desde hace muchos años vinculado a dificultades estructurales la corrupción, la impunidad, la pobreza y la ineficiencia en la procuración e impartición de justicia.
Expertos en el tema reseñan que la problemática del sistema penitenciario está íntimamente relacionada al funcionamiento del sistema de impartición de justicia. Actualmente, los centros de reinserción social en México tienen una sobrepoblación de 54,063 reclusos, cifra equivalente al 21% de la población total penitenciaria; esta situación responde principalmente a la gran cantidad de población procesada (aquella que está en espera de recibir sentencia) que está recluida en las cárceles mexicanas y que, en el caso del fuero común, la cifra asciende a 83,761 personas. Es esencial que la reforma al sistema de justicia penal se traduzca en una impartición de justicia más expedita, sobre todo respecto al proceso de dictar sentencia.
La sobrepoblación y hacinamiento en los centros penitenciarios mexicanos conlleva mayores problemas, tales como: la convivencia entre población sentenciada y procesada; la separación inadecuada de hombres y mujeres en áreas de servicio médico, actividades educativas y visita íntima, y disminución de la capacidad del personal penitenciario por insuficiencia.
ESTÁ PENDIENTE
La aprobación de la Ley Federal del Sistema Penitenciario y de Ejecución de Sanciones continúa pendiente en el Senado de la República, a pesar de haber recibido el proyecto desde el año 2012. Los centros penitenciarios requieren de un código de procedimientos para que su operación pueda ser realizada bajo criterios unificados y con estricto respeto a los derechos humanos. En orden de hacer efectiva la mejora de los centros de reinserción social en su operación, es necesario el establecimiento de mecanismos de evaluación y supervisión de los centros penitenciarios que generen recomendaciones de carácter vinculante.
También se requiere: la prevención de la corrupción en los centros penitenciarios; una utilización más eficiente de los recursos destinados al sistema penal, pues México es uno de los países en Latinoamérica que más gasta en mantener a sus reos; mayor impulso a programas de trabajo y de capacitación para el mismo en los centros penitenciarios, y la protección de grupos con necesidades específicas dentro de las cárceles.
BD
Con información de: www.animalpolitico.com