Cabudare es una ciudad ubicada en el estado Lara al centro occidente de Venezuela, tiene alrededor de 80 mil habitantes y una histórica vocación agrícola. Sin saberlo, estos ciudadanos estuvieron a punto de explotar la noche de este martes, debido a la acción terrorista de «manifestantes» que secuestraron una gandola que transporta gasolina y le prendieron fuego.
El presidente de Pdvsa, Eulogio Del Pino, explicó que la gandola iba vacía y que en esas condiciones es mucho más peligroso su contacto con el fuego. Lo que salvó a la población fue que el conductor, quien fue secuestrado y amenazado por los terroristas, logró liberar la válvula que contenía los gases en la cisterna.
«De no haber liberado el conductor los gases que contenía el cisterna, ha podido estallar la gandola y su onda expansiva hubiera alcanzado varios kilómetros alrededor, hubiera causado una destrucción equivalente a una bomba, es decir no sólo hubiera acabado con la vida de estos terroristas, sino que ha podido causar la muerte de muchos inocentes», explicó Del Pino.
Informó que a pesar de este ataque, Pdvsa garantiza el suministro de gasolina en todo el país. Dijo que a diario transitan más de 1600 gandolas por todo el territorio nacional para garantizar el abastecimiento de combustible.
El presidente de Pdvsa advirtió que ya los organismos de seguridad han identificado a algunos de los responsables y están tras la pista de todos los que participaron en el hecho.
JS