Desoyendo el anuncio hecho este jueves por el inquilino de la Casa Blanca, quien amenazó con enviar más tropas hacia la frontera sur de EEUU, miles de migrantes centroamericanos retomaron su camino desde la capital de México hacia el norte, para solicitar el asilo en los puntos fronterizos.
La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal reportó la salida, en horas de la mañana, de unos 2.300 migrantes que permanecían en un albergue habilitado en el estadio Jesús Martínez “Palillo”, ubicado en el Distrito Federal.
A bordo de unidades del Sistema de Transporte Colectivo o de camiones, los migrantes se disponen a continuar su trayecto, aunque muchos no tienen muy claro qué rumbo tomarán para alcanzar el paso menos peligroso.
Óscar López, un hondureño de 33 años, quien emprendió la travesía junto a su esposa y dos hijos, planea llegar a Monterrey y desde allí buscar una «frontera más accesible«, para entregarse a las autoridades migratorias de EEUU, con la esperanza de no ser devuelto.
El pasado viernes, EEUU envió de regreso a México al primer migrante centroamericano, quien deberá esperar en la ciudad fronteriza de Tijuana, donde aguardan miles de compatriotas, mientras se procesa su solicitud de asilo.
YBV