Este fin de semana un conductor kamikaze de 52 años y nacionalidad española estuvo muy cerca de provocar ayer una tragedia en la M-30 de Madrid.
El chófer recorrió el anillo de circunvalación principal de la capital en sentido contrario alrededor de 19 kilómetros. Al final de su largo trayecto, y después de una persecución policial, provocó un accidente con otros cuatro vehículos a la altura del Puente de los Franceses.
El resultado final de ese recorrido dejó un total de ocho heridos. Hasta ahora se desconocen las causas, pues el kamikaze, que conducía un Audi Cabrio descapotable de color negro entró sobre las 23.00 horas de este sábado en el carril exterior de la M-30 a la altura del kilómetro 2, muy cerca del Nudo de Manoteras, en sentido contrario aparentemente sin ninguna explicación.
A partir de ahí comenzó su recorrido, en el que se cruzó con varios vehículos. De hecho, las llamadas de varios conductores que se cruzaron con él llevan a los investigadores a situar su aparición en sentido contrario en el kilómetro 2, ya que las cámaras de seguridad de la M-30 no notaron su presencia hasta el kilómetro 8.
Al llegar al kilómetro 21, tras protagonizar una persecución con varios coches de Policía Municipal y Nacional que salieron a su paso para evitar su circulación.
Los coches afectados estaban a una amplia distancia los unos de los otros, el hombre tan sólo ha resultado policontusionado y tras ser liberado por los bomberos de la Comunidad de Madrid ha sido trasladado al hospital Clínico con pronóstico menos grave.
La Policía Municipal, que tuvo que cortar la circulación en la carretera de circunvalación para que los servicios de emergencia pudieran trabajar. El hombre ha sido sometido a análisis de droga y alcoholemia. El hombre se encuentra ingresado y custodiado en su habitación del hospital acusado de un delito contra la seguridad vial.
Leer también:
NB