La espera de los fanáticos de los teléfonos Iphone ha llegado a su fin, y es que la compañía de la manzanita presentó sus dos nuevos terminales: el XS y el XS Max, que si bien es cierto superan en algunos aspectos a sus predecesores han decepcionado en temas tan importantes como la calidad de su batería y su capacidad de almacenamiento.
La principal crítica tiene que ver con el último punto, pues consideran que un teléfono por el que la compañía pide más de mil euros debería tener una memoria interna mayor a 64 GB. Otra de las características que han desilusionado a los más fervientes seguidores de la marca, es que la compañía repitió el diseño de su modelo anterior.
Esta particularidad molesta a los usuarios, quienes esperaban un diseño sin marcos con el que se pudiera aprovechar mucho más el frontal de la pantalla. Sin embargo, el punto que más preocupa es el de la batería, pues los expertos aseguran que dura mucho menos que la del Iphone X. Además, la compañía continúa empacando junto con los teléfonos cargadores que no son nada rápidos, lo que representa un costo adicional para los clientes.
Pero quizá la mayor decepción provenga de las cámaras de estos equipos. Y es que a los entendidos en el tema les ha parecido un detalle muy conservador que no se haya incluido al menos un objetivo más luminoso en la cámara principal o un zoom de mayor potencia en los modelos con cámara dual.
A pesar de todo esto, los seguidores de la firma aseguran que seguirán apostando a la marca, que aunque no complazca del todo a los usuarios sigue siendo pionera en desarrollo de hardware y software a nivel mundial.
ARG