Tras la elección de las nuevas autoridades de la Cámara de Diputados y del Senado, el primer ministro de Italia Paolo Gentiloni presentó su renuncia al presidente Sergio Mattarella, aunque continuará en el cargo hasta que el Parlamento pueda formar un nuevo gobierno.
Paolo Gentiloni continuará en su puesto «para los asuntos de administración ordinaria» hasta que los 630 diputados y 315 senadores le den un nuevo Ejecutivo al país.
La dimisión del jefe de gobierno forma parte del procedimiento de sucesión, una vez elegidos los presidentes del Senado y la Cámara de Diputados de la nueva legislatura, María Elisabetta Alberti Casellati, del partido Fuerza Italia y Roberto Fico, del Movimiento 5 Estrellas, respectivamente.
Alberti es la primera mujer que presidirá el Senado italiano.
Al nuevo parlamento le corresponderá pronunciarse sobre la formación del nuevo ejecutivo, siempre bajo la mirada atenta del presidente, quien a partir del venidero 3 de abril comenzará las consultas con los representantes de las fuerzas representadas en el legislativo, para determinar si existe una mayoría para crear el próximo gobierno.
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