Guinea Ecuatorial, el rico país centroafricano pero paradójicamnete empobrecido, acudió al más alto tribunal de la Organización para las Naciones Unidas (ONU) para impugnar una condena que hiciera una investigación francesa contra su vicepresidente, Teodorin Obiang, por malversación de fondos públicos.
El país galo respondió y pidió al alto tribunal de la ONU que rechace establecer que «Teodorín», hijo del presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema, puede disfrutar de inmunidad diplomática gracias a su cargo.
El vicepresidente del país africano «intenta escapar» de un proceso penal «en el que actuó como una persona privada», dijo ante los jueces Allain Pellet, profesor emérito de la Universidad de París Nanterre. Además la convención de la ONU contra la Delincuencia Organizada Trasnacional, no establece excepciones o inmunidades en ningún apartado, ni siquiera para vicepresidentes de Estados.
Algunos cuantos excesos
El «muchacho» vicepresidente fue imputado en octubre de 2017 a tres años de cárcel y 30 millones de euros de multa por blanqueo de dinero, conseguido en su propio país a través de prácticas corruptas, aunque ambas penas fueron declaradas exentas de cumplimiento siempre y cuando el condenado no reincidiera.
La Justicia confiscó todos sus bienes comprados en Francia mediante dicho blanqueo, los cuales están valorados en más de 100 millones de euros e incluyen edificios, vehículos de alta gama y otros artículos de lujo.
La nación africana ha rechazado todas las acusaciones y su embajador en Holanda, Carmelo Nvono-Ncá, afirmó en un comunicado que la sentencia del Tribunal Correccional de París contra «Teodorín» fue una «violación flagrante del derecho internacional» y causó «una real indignación» en su país.
La delegación de Guinea Ecuatorial intervendrá mañana ante la Corte Internacional de Justicia, en la que será la segunda jornada de audiencias orales del caso, y el juicio continuará hasta el viernes.
DC
