La pieza más buscada durante la inauguración de la Feria Internacional de Arte Contemporáneo de Madrid 2018, era precisamente la que no estaba. La dirección de IFEMA, donde se celebra la feria, pidió a la galería Helga de Alvear que dejara de exhibir la pieza.
¿La Razón?
La obra Presos políticos en la España contemporánea, de Santiago Sierra, es una serie de 24 retratos pixelados de otros tantos personajes reconocibles en alguno de sus rasgos borrosos. Entre ellos, Oriol Junqueras, presidente de ERC, Jordi Sànchez, presidente de la Asamblea Nacional Catalana, Jordi Cuixart, de Òmniun Cultural y entre otros presos y perseguidos del gobierno español por «El Proces»
“La polémica que ha provocado en los medios de comunicación la exhibición de estas piezas está perjudicando la visibilidad del conjunto de los contenidos de Arco Madrid, y por tanto el IFEMA considera su responsabilidad, como organizadora, tratar de alejar de su desarrollo los discursos que desvíen la atención del conjunto de la feria”.
¿Qué dice el artista?
Lo anterior fue lo expresado por el IFEMA con respecto a la decisión de llamar a la galería para que removiesen la obra, además de leerse en el comunicado la frase: Desde el máximo respeto a la libertad de expresión. Vaya detalle.
Por su parte el creador de la polémica pieza también se pronunció, lo hizo a través de Facebook, y además de informar ya conocido el asunto, sostuvo que lo sucesido era una «relativa» sorpresa y era una falta de respeto a la galerista y a los propios visitantes de la feria. Al mismo tiempo.
Finalmente, creemos que actos de este tipo dan sentido y razón a una pieza como ésta, que precisamente denunciaba el clima de persecución que estamos sufriendo los trabajadores culturales en los últimos tiempos.
DC