En el vigésimo día de cierre parcial del Gobierno de EEUU, el inquilino de la Casa Blanca amenazó con declarar la «emergencia nacional» en la frontera sur de no llegarse a un acuerdo que permita la inclusión en el presupuesto del dinero requerido para la construcción del muro con México.
En directa alusión a los líderes demócratas en el Congreso, quienes han dicho que no financiarán un muro ineficaz, el magnate aseguró tener «todo el derecho a declarar la emergencia nacional», ante el riesgo que corre de no cumplir con una de sus promesas de campaña.
«Todavía no lo he hecho, pero puede que lo haga. Si las negociaciones no funcionan, probablemente lo haré. Es casi seguro que lo haré«, agregó en declaraciones a la prensa desde la Casa Blanca, minutos antes de partir a la ciudad McAllen, Texas.
El inquilino de la Casa Blanca ha solicitado 5.700 millones de dólares para la construcción del polémico muro, que ya no sería de concreto sino de vigas de acero, para frenar, según éste, el ingreso de drogas e inmigrantes indocumentados.
La declaratoria de emergencia, que ya tiene sus detractores, agudizaría la pugna entre Demócratas y Republicanos a lo interno de la Cámara de Representantes y aleja aún más la posibilidad de un acuerdo que permita poner punto final al cierre de la Administración.
YBV