Estados Unidos ha ejercido presión pública para coaccionar a los países de la Organización de Estados Americanos, el secretario general de esta organización, Luis Almagro, ha violado las normas de la OEA las veces que ha sido necesario para aplicar una Carta Democrática Interamericana sin que el Gobierno del país suramericano lo haya solicitado, como lo establece ese documento.
El clímax, Bolivia y Haití debían presidir la sesión permanente de este lunes, pero la suspendieron por no estar claros los puntos y en una franca acción de factores, montaron a Honduras en la presidencia e iniciaron una sesión para juzgar a Venezuela, en un momento en que varios de los países que la señalan, enfrentan graves acusaciones por corrupción, violaciones a los derechos humanos y hasta golpes de Estado.
Roy Chaderton, diplomático venezolano que conoce al monstruo por dentro, pues ejerció como embajador de su país ante la OEA, opinó que «Estados Unidos y su grupo de batalla impusieron un golpe de Estado, con una curiosidad especial porque no sólo es por éste sino por el procedimiento que estuvo fuera de la normativa, y es la acción de un pelotón de linchamiento constituido por algunos Estados. Estas cosas son inauditas en la OEA, hasta donde yo recuerdo, nunca había ocurrido”, indicó.
Sin embargo, para Chaderton la situación de la OEA es una agresión que se repite año tras año. Sostuvo que es preocupante que la oposición venezolana busque una intervención al estar conscientes de las consecuencias negativas que eso podría traer al país. «Donde se van a esconder los opositores que están buscando apoyo internacional para intervenir a Venezuela cuando ocurran los ataques y haya que dar una respuesta a los venezolanos», reflexionó el diplomático.
A Chaderton le causa curiosidad la moral de los países a quienes acuden los dirigentes de la derecha venezolana.«Buscan apoyo en países que no tienen moral para emitir juicios sobre la democracia o institucionalidad de Venezuela. Ahí está Michel Temer que comenzará a ser juzgado por corrupción.»
Finalmente resaltó la valentía de países pequeños como Haití, República Dominicana y El Salvador, que fueron amenazados por EE.UU. y sin embargo no aprobaron la resolución final, que además es ilegal por el contexto en el que se desarrolló.
JS