El calentamiento global y el cambio climático son conceptos comúnmente confundidos, puesto que aunque el calentamiento global es tan solo uno de los aspectos recogidos por el cambio climático, éste también es empleado para referirse a la evolución de la tendencia del clima a lo largo de la historia geológica.
Resulta esencial profundizar en este gran problema ambiental que nos afecta hoy en día en todo el mundo, y que seguirá haciéndolo durante muchos años más.
El calentamiento global hace referencia al aumento de la temperatura media de los océanos y de la atmósfera, y actualmente ha sido alarmante a escala mundial en las últimas décadas.
Mientras Europa está azotada por «la Bestia del Este», en el Ártico el calor «nunca ha sido tan extremo».
Un inusual calentamiento cerca del Polo Norte está enviando una ráfaga de frío ártico sobre Europa, un evento que puede darse más a menudo como consecuencia del calentamiento global provocado por el hombre, dijeron los científicos.
En el extremo norte de Groenlandia, el centro meteorológico Cape Morris Jesup, ha tenido un récord de 61 horas de temperaturas por encima del punto de congelación en lo que va de 2018, lo que fue vinculado a un raro retroceso del hielo marino en la oscuridad del invierno ártico.
In 2018, there have already been 61 hours above freezing at Cape Morris Jesup, Greenland.
The previous record was 16 hours before the end of April in 2011. pic.twitter.com/BCgcxAtKng
— Dr. Robert Rohde (@RARohde) February 26, 2018
«Nunca ha sido tan extremo», dijo Ruth Mottram, científica del Instituto Meteorológico de Dinamarca. El calor llega al Ártico tanto desde el Atlántico como a través del Estrecho de Bering.
Alrededor de toda la región ártica, las temperaturas son ahora de aproximadamente 20 grados Celsius por encima de lo normal y se ubican en menos 8 grados, de acuerdo a los cálculos del instituto.
El calor del Ártico y el frío extremo de «la bestia del este»
Mientras el Polo Norte está especialmente cálidoa, al menos para lo que se espera en este punto del planeta en esta época del año, Europa se cubre de un inmenso manto blanco por la denominada «Bestia del este» y muchas de sus poblaciones están en temperaturas bajo cero.
Lo que se puede confirmar es que en los últimos tres años se han ido registrando temperaturas récord en el Ártico y prevén que las olas de calor sean recurrentes, más intensas y de mayor duración en el futuro.
Hacia el sur, una inusual tormenta de nieve golpeó el lunes Roma. En ciudades que van desde Varsovia a Oslo, las temperaturas cayeron con fuerza por los vientos del este.
Ya en 1973, un estudio sugirió que un océano Ártico sin hielo podría hacer que regiones ubicadas al sur fueran más frías. «Esta variación del clima continúa con una fuerza y persistencia aterradoras», tuiteó el profesor Lars Kaleschke, profesor de la Universidad de Hamburgo.
The northerly warm airflow opened up the sea ice north of Greenland. This large open water area is very unusual. I haven't seen a similar event like this before in the almost 25 years I now work with satellite data. pic.twitter.com/RJcONASaO4
— Lars Kaleschke (@seaice_de) February 26, 2018
«La pregunta es si esto se producirá más a menudo. Este es solo un evento, por lo que es difícil establecer una relación causal», dijo Kaleschke a Reuters.
El hielo marino en el océano Ártico está en un mínimo histórico para fines de febrero de 14,1 millones de kilómetros cuadrados, de acuerdo a datos de Estados Unidos. Eso es alrededor de un millón de kilómetros cuadrados menos que lo normal, una superficie similar a la de Egipto.
«Lo que alguna vez consideramos anomalías se están convirtiendo en la nueva normalidad. Nuestro clima está cambiando frente a nuestros ojos y tenemos poco tiempo para evitar que esto empeore significativamente», dijo a Reuters Erik Solheim, funcionario de clima de la ONU.
Según el acuerdo climático de París 2015, casi 200 naciones acordaron limitar el aumento de las temperaturas a «muy por debajo» de 2 grados Celsius por encima de la era preindustrial.
Malas noticias sobre el cambio climático
Que las temperaturas superen los 0 ºC en el Polo Norte solo puede generar problemas, aseguran.
«Ese es el punto en el que todo cambia. Es extremadamente excepcional», le dijo Marco Tedesco, un geofísico del Observatorio Terrestre Lamont-Doherty, perteneciente a la Universidad de Columbia, en Nueva York, Estados Unidos, a la publicación Vox.
La subida de las temperaturas hace que el hielo sea más delgado y menos denso y, por tanto, más sensible al calor.
Si el hielo se derrite más fácilmente, esto puede afectar a todo el sistema meteorológico ártico además de que puede alterar notablemente al nivel del mar, con consecuencias climatológicas para todo el planeta.
Los picos rápidos de temperaturas son un fenómeno meteorológico común, incluso en el Ártico. Lo que preocupa a los científicos es que esa frecuencia aumente.
Eso, agregado a unas temperaturas globales en aumento, es para los científicos una clara señal de que el clima está cambiando incluso más rápido de lo que se pensaba hace unos años.
La situación ha alarmado a la comunidad científica, que podría replantearse sus más pesimistas pronósticos referentes al «cambio climático».
Así lo informa el diario británico The Guardian, que ha expuesto con datos históricos y recientes cómo el Ártico vive días calurosos por encima al promedio.
The extreme event continues to unfold in the high #Arctic today in response to a surge of moisture and "warmth"
2018 is well exceeding previous years (thin lines) for the month of February. 2018 is the red line. Average temperature is in white (https://t.co/kO5ufUWrKq) pic.twitter.com/cLeMxSxvWo
— Zack Labe (@ZLabe) February 25, 2018
En esta imagen de Zack Labe, meteorólogo de la Universidad de California Irvine, muestra cómo la temperatura de estos días en el Ártico (línea roja) está muy por encima de su media histórica (línea blanca).
La estación más al norte de Groenlandia registró el pasado 23 de febrero una temperatura de 6°C, algo completamente atípico considerando que allí se vive estos días el denominado invierno polar.
Es «loco», «raro» y «simplemente impactante», afirman los expertos.
«Esta es una anomalía entre las anomalías», dice el director del Centro de Ciencias del Sistema Terrestre de la Universidad Estatal de Pensilvania, Michael Mann.
El calentamiento global siempre se ha considerado con efecto en el mediano y largo plazo, pero estas situaciones que se observan en el Ártico y tan reiteradamente, preocupan.
«El Ártico siempre ha sido considerado como un referente debido al círculo vicioso que amplifica el calentamiento causado por el hombre en esa región en particular». Con esto -añade Mann- » está enviando una advertencia clara».
Erik Solheim, funcionario de clima de la ONU, dijo a la agencia Reuters que lo que ocurre en el Ártico es un asunto grave y mundial.
«Nuestro clima está cambiando vertiginosamente frente a nuestros ojos y ya no tenemos casi tiempo para evitar que esto empeore», finalizó Solheim.
Con información de Reuters, BBC Mundo e Infobae