La primera ministra, Theresa May, dijo este domingo que Gran Bretaña podría perder el rumbo si el Parlamento rechaza su acuerdo para un Brexit, a fines de este mes, y negó que pretenda retrasar el voto de los legisladores por segunda vez.
Se espera que Gran Bretaña abandone la Unión Europea (UE) el 29 de marzo, pero hasta ahora la incapacidad de May para obtener la aprobación del Parlamento para una salida acordada alarma a los líderes empresariales e inversores.
May dijo que la votación en el Parlamento se realizaría alrededor del 15 de enero, como se esperaba y contrariamente a las informaciones que apuntaban a que podría retrasarla, como ya lo hizo en diciembre, cuando quedó claro que perdería a menos que se consiguieran más garantías de la UE.
A la expectativa por la respuesta del Parlamento
Al describir lo que sucedería si es derrotada, May dijo a la BBC: «Si el acuerdo no se aprueba en esta votación que está por venir, entonces realmente estaremos en un tierra ignota. No creo que nadie pueda decir exactamente qué sucederá en términos de la reacción que veremos en el Parlamento».
En medio de la incertidumbre sobre los próximos pasos de Gran Bretaña, que van desde irse sin llegar a un acuerdo hasta no irse, una encuesta mostró que más británicos quieren seguir siendo miembros de la UE que los que se van, y que los votantes quieren tomar la decisión final. Además, algunos en su propio partido temen que el punto diseñado para evitar una frontera dura entre Irlanda e Irlanda del Norte pueda dejar al país sujeto a las normas de la UE indefinidamente.
FF